HÉRIBCAMPOS CERVERA (Padre)
(Enlace a datos biográficos y obras
en la GALERÍA DE LETRAS del
LA RUBIA DE MARFIL
¡Oh qué bella es la rubia de marfil!
Hace tiempo que leo en sus pupilas
Un mundo de bellísimos ensueños;
Hace tiempo que sé lo que ella piensa
Sin saber lo que sé...
.
En sus azules ojos se dibuja
Lo infinito de su alma,
Lo vago de sus hondos pensamientos
Y su dormida calma.
.
Ella sabe y no sabe muchas cosas
Qué siente y no precisa,
Se ve a sí misma, blanca Margarita;
Y en sus ensueños dormita,
Y en sus vigilias teje con su alma
El castillo que Fausto le dedica.
.
En la dorada jaula de sus sueños
Trabaja su alma pura
Y edifica palacios orientales
De blanca talladura,
En ellos tocan místicas canciones
De Oriente los viajeros,
Y un Apolo de azules ilusiones
La invita a rechazar los caballeros
Que no saben herir los corazones.
.
¡Cuánta luz azulada la rodea
En la luz de su propia inteligencia!
¡Cuánto la adora y ama el épico Lohengrin!
En su barca recorre y su marea
Buscándola dichoso por Valencia,
Sevilla, Como y el alegre Rin...
.
Y la rubia de hermosa cabellera
Arropada en su blanca vestidura
En su palacio gótico lo espera
¡Soñando como Elsa en la dulzura
Del amor de su heroico caballero!
.
Publicado en: El Monitor, Asunción, 16 de enero de 1911
Hérib Campos Cervera (Padre): Supo torcer el cuello al cisne y suplir la elocuencia con la intensidad.
¡Oh qué bella es la rubia de marfil!
Hace tiempo que leo en sus pupilas
Un mundo de bellísimos ensueños;
Hace tiempo que sé lo que ella piensa
Sin saber lo que sé...
.
En sus azules ojos se dibuja
Lo infinito de su alma,
Lo vago de sus hondos pensamientos
Y su dormida calma.
.
Ella sabe y no sabe muchas cosas
Qué siente y no precisa,
Se ve a sí misma, blanca Margarita;
Y en sus ensueños dormita,
Y en sus vigilias teje con su alma
El castillo que Fausto le dedica.
.
En la dorada jaula de sus sueños
Trabaja su alma pura
Y edifica palacios orientales
De blanca talladura,
En ellos tocan místicas canciones
De Oriente los viajeros,
Y un Apolo de azules ilusiones
La invita a rechazar los caballeros
Que no saben herir los corazones.
.
¡Cuánta luz azulada la rodea
En la luz de su propia inteligencia!
¡Cuánto la adora y ama el épico Lohengrin!
En su barca recorre y su marea
Buscándola dichoso por Valencia,
Sevilla, Como y el alegre Rin...
.
Y la rubia de hermosa cabellera
Arropada en su blanca vestidura
En su palacio gótico lo espera
¡Soñando como Elsa en la dulzura
Del amor de su heroico caballero!
.
Publicado en: El Monitor, Asunción, 16 de enero de 1911
Hérib Campos Cervera (Padre): Supo torcer el cuello al cisne y suplir la elocuencia con la intensidad.
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Fuente: POESÍAS DEL PARAGUAY – ANTOLOGÍA DESDE SUS ORÍGENES. Realización y producción gráfica: ARAMÍ GRUPO EMPRESARIAL, Dirección de la obra: OSCAR DEL CARMEN QUEVEDO. Recopiladores y autores: RAÚL AMARAL, MARÍA BARRETO DE RAMÍREZ, AÍDA ORTÍZ DE CORONEL, ELA RAMONA SALAZAR S., RUDI TORGA / Tel. (595-21) 373.594 / arami@rieder.net.py – Asunción / Paraguay. 2005. 781 pp.).
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