FESTIVALES DE MÚSICA
Autor: LUIS SZARÁN
(Enlace a datos biográficos y obras
En la GALERÍA DE LETRAS del
www.portalguarani.com )
Autor: LUIS SZARÁN
(Enlace a datos biográficos y obras
En la GALERÍA DE LETRAS del
www.portalguarani.com )
.
FESTIVALES DE MÚSICA
La mayoría de los festivales de música -entendidos como encuentros de intérpretes y creadores- que se llevan a cabo en forma ininterrumpida en el Paraguay, son, principalmente, los relacionados a la música de inspiración folklórica. En 1968 se organizó en la ciudad de Encarnación el Primer Festival Nacional del Folklore. Al año siguiente la segunda edición se llevó a cabo en el Estadio Comuneros (hoy desaparecido) y en 1970 en el estadio del Club Olimpia. Esta modalidad a nivel nacional no continuó pero se trasladó al ámbito universitario, en dos frentes, uno oficialista y el otro contestatario, dominando, esta actividad, la vida musical de la década del 70.
Desde el año 1971 se realiza, durante el mes de setiembre, años tras años, el más importante de los festivales de música del Paraguay. El Festival de Ypacaraí, que reúne calificados representantes de la música popular de inspiración folklórica del país y América. Entre 1985 y 1988, debido a la intolerancia y persecución política, sus ediciones se llevaron a cabo en el exilio, en la Argentina. Luego del golpe del 2 y 3 de febrero de 1989 continúa sin interrupciones, abarcando en los últimos años no solamente la música, sino también la artesanía, el teatro popular y la danza. En 1987 la Alianza Francesa de Asunción inició los Festivales Rochas del Arpa, con el objetivo de rescatar el repertorio tradicional del arpa paraguaya y promover la creación de nuevas obras. Durante los primeros años se llevó a cabo en forma anual, con la participación de arpistas de diferentes partes del mundo, y actualmente en ediciones bi-anuales. De estos festivales surgieron jóvenes y destacados arpistas. El movimiento Nuevo Cancionero se inició en el ámbito de festivales universitarios, como principal arma cultural de la resistencia. Posteriormente, durante la década de 1980 se organizaron los festivales Mandu´arä, dedicados principalmente a la música contestataria y popular.
Organizados por el Coro de Universidad Católica de la Ciudad de Encarnación (CORUCE) y la Municipalidad de Encarnación desde 1986 se llevaron a cabo los festivales internacionales de música coral. En los últimos años de manera discontinua. En 1988 se llevó a cabo el Festival Rock Sanber dedicado a la música popular y con participación de grupos nacionales e internacionales, lamentablemente la exitosa iniciativa no continuó.
A partir de la década del 80, se incentivaron los festivales en ciudades y pueblos del interior, en base a productos característicos de cada zona o a festividades religiosas. Los más trascendentes y de actividad ininterrumpida son:
Kambuchi de Itá, deYaguarón, de la Sandía y Cerro Perö de Paraguarí, de la Alfalfa de Sapucai, Guavira poty de Caballero, del Poyvi de Carapeguá, Vakapipopo y del Lago Ypoá de Quiindy, Nautico de Villa Florida, de San Juan Misiones, Encuentro de la polca y el chamamé de San Ignacio Misiones, del Ovecha rague de San Miguel, del Chipa de Coronel Bogado, de la Espiga de Carmen, de Ayolas, de Itapúa (continuación del primer festival nacional desde 1968), del Ka´a poty de Colonias Unidas, de las Tres fronteras de Pte. Franco, Amistad y de Exaltación Folklórica de Ciudad del Este, del Agro y la Energía de Hernandarias, de la Paloma, Ko´etï de Saltos del Guairá, Guavirami de Juan Manuel Frutos, de la Madera y el de la Cosecha de Caaguazú, Otoñal de Coronel Oviedo, Tapirakuäi de Santaní, de Itacurubí del Rosario, Takuare’ ë de San José, Yaguy de Itacurubí de la Cordillera, Chipa de Barrero, Arasa de Caacupé, Ñandutí de Itauguá, de la Madre de Altos, el Auténtico Festival del Lago de San Bernardino, de la Frutilla de Areguá, de la Canción de Luque, de la Miel de Benjamín Aceval, del Acero de Villa Hayes, del Takuare’ë de Guarambaré, San Isidro Labrador de Nueva Italia, Río Paraguay de Villeta, de Concepción, del Algodón y la Naranja de San Pedro, de la Naranja de Cedrales, del Takuare’ë poty de Iturbe, Ykua Bolaños de Caazapá, Ita karu de Yuty, San Solano de San Pedro del Paraná, de la Yerba Mate de Pedro Juan Caballero, del Río Apa de Vallemí, de Arroyos y Esteros, del Sombrero pirí de Limpio, de La Mercé de Zeballos cué, Itaipú de Ciudad del Este, del Tarefero de Juan León Mallorquín, de la Raza de Villarrica, Crisol de razas de Encarnación, del Aopo´i de Yataity, del Poncho de sesenta listas de Piribebuy y numerosos más que sobrepasan los 90 festivales.
Debido al auge de estos festivales, en número creciente y variedad de propuestas, en 1994 se creó la coordinadora de festivales de música del Paraguay.
A nivel internacional el mas importante festival de la canción, que entre 1978 y 1996 tuvo a compositores e interpretes paraguayos como representantes fue el Festival de la Organización de la Televisión Iberoamericana (OTI).
En la primera edicion llevada a cabo en Santiago de Chile (1978) participó Rolando Percy con la canción: Cantando de Jorge Krauch y Maneco Galeano, luego Derlis Esteche con: Tu vida en mi canción, de su autoría en Caracas, Venezuela (1979); Carlos Albospino con: La razón que nos une de Antonio Medina Bosselli en Bs. As., Argentina (1980), Alberto de Luque con: Vos y yo seremos todo de su autoría con Humberto Rubín en México (1981).
La edición de 1982 en Lima, Perú no tuvo representante de Paraguay.
Siguieron en 1983 Marcos de Brix con: Soñaremos como ayer, de Antonio Medina Boselli en Washington, Estados Unidos; en 1984, Valencia con: Una gaviota sobre el mar, de Casto Darío Martínez en México; en 1985 Lizza Bogado con: A veces quiero ser de su autoría, en Sevilla, España; en 1986 Rocío Cristal con: Papá de Casto Darío Martínez en Santiago de Chile; en 1987 Rolando Ojeda con: Procura de Pilo Lloret en Lisboa, Portugal; en 1988 Marco de Brix con: Un mundo diferente de Antonio Medina Bosselli, unica canción en la historia de las representaciones paraguayas de la OTI que se ubicó en segundo puesto en Bs. As., Argentina; en 1989 Rodolfo González Friedman con: Como aquellas nubes de Pilo Lloret en Miami, Estados Unidos; en 1990 Rolando Percy con: Hacédme soñar con la paz de su autoría en Las Vegas, Estados Unidos; en 1991 Adrián Barreto con: Hoy ha vuelto el amor de su autoría en Acapulco, México; en 1992 Oscar Benito con: Un amanecer...una canción de Antonio Medina Boselli, en Valencia, España; en 1993 Dany Durand con: Señora mía de su autoría y Rolando Percy en Valencia, España; en 1994 Cristina Vera Díaz con: Madre tierra de su autoría en Valencia, España; en 1995 Rolando Percy con: Por siempre américa de su autoría en San Bernardino, Paraguay; en 1996 los directivos de la OTI decidieron concluir con la serie de festivales. Paraguay estuvo representado por Jorge Castro.
Fuente: DICCIONARIO DE LA MÚSICA EN EL PARAGUAY por LUIS SZARAN. Edición de la Jesuitenmission Nürnberg, Alemania 2007. 507 páginas. Edición digital: www.luisszaran.org .
FESTIVALES DE MÚSICA
La mayoría de los festivales de música -entendidos como encuentros de intérpretes y creadores- que se llevan a cabo en forma ininterrumpida en el Paraguay, son, principalmente, los relacionados a la música de inspiración folklórica. En 1968 se organizó en la ciudad de Encarnación el Primer Festival Nacional del Folklore. Al año siguiente la segunda edición se llevó a cabo en el Estadio Comuneros (hoy desaparecido) y en 1970 en el estadio del Club Olimpia. Esta modalidad a nivel nacional no continuó pero se trasladó al ámbito universitario, en dos frentes, uno oficialista y el otro contestatario, dominando, esta actividad, la vida musical de la década del 70.
Desde el año 1971 se realiza, durante el mes de setiembre, años tras años, el más importante de los festivales de música del Paraguay. El Festival de Ypacaraí, que reúne calificados representantes de la música popular de inspiración folklórica del país y América. Entre 1985 y 1988, debido a la intolerancia y persecución política, sus ediciones se llevaron a cabo en el exilio, en la Argentina. Luego del golpe del 2 y 3 de febrero de 1989 continúa sin interrupciones, abarcando en los últimos años no solamente la música, sino también la artesanía, el teatro popular y la danza. En 1987 la Alianza Francesa de Asunción inició los Festivales Rochas del Arpa, con el objetivo de rescatar el repertorio tradicional del arpa paraguaya y promover la creación de nuevas obras. Durante los primeros años se llevó a cabo en forma anual, con la participación de arpistas de diferentes partes del mundo, y actualmente en ediciones bi-anuales. De estos festivales surgieron jóvenes y destacados arpistas. El movimiento Nuevo Cancionero se inició en el ámbito de festivales universitarios, como principal arma cultural de la resistencia. Posteriormente, durante la década de 1980 se organizaron los festivales Mandu´arä, dedicados principalmente a la música contestataria y popular.
Organizados por el Coro de Universidad Católica de la Ciudad de Encarnación (CORUCE) y la Municipalidad de Encarnación desde 1986 se llevaron a cabo los festivales internacionales de música coral. En los últimos años de manera discontinua. En 1988 se llevó a cabo el Festival Rock Sanber dedicado a la música popular y con participación de grupos nacionales e internacionales, lamentablemente la exitosa iniciativa no continuó.
A partir de la década del 80, se incentivaron los festivales en ciudades y pueblos del interior, en base a productos característicos de cada zona o a festividades religiosas. Los más trascendentes y de actividad ininterrumpida son:
Kambuchi de Itá, deYaguarón, de la Sandía y Cerro Perö de Paraguarí, de la Alfalfa de Sapucai, Guavira poty de Caballero, del Poyvi de Carapeguá, Vakapipopo y del Lago Ypoá de Quiindy, Nautico de Villa Florida, de San Juan Misiones, Encuentro de la polca y el chamamé de San Ignacio Misiones, del Ovecha rague de San Miguel, del Chipa de Coronel Bogado, de la Espiga de Carmen, de Ayolas, de Itapúa (continuación del primer festival nacional desde 1968), del Ka´a poty de Colonias Unidas, de las Tres fronteras de Pte. Franco, Amistad y de Exaltación Folklórica de Ciudad del Este, del Agro y la Energía de Hernandarias, de la Paloma, Ko´etï de Saltos del Guairá, Guavirami de Juan Manuel Frutos, de la Madera y el de la Cosecha de Caaguazú, Otoñal de Coronel Oviedo, Tapirakuäi de Santaní, de Itacurubí del Rosario, Takuare’ ë de San José, Yaguy de Itacurubí de la Cordillera, Chipa de Barrero, Arasa de Caacupé, Ñandutí de Itauguá, de la Madre de Altos, el Auténtico Festival del Lago de San Bernardino, de la Frutilla de Areguá, de la Canción de Luque, de la Miel de Benjamín Aceval, del Acero de Villa Hayes, del Takuare’ë de Guarambaré, San Isidro Labrador de Nueva Italia, Río Paraguay de Villeta, de Concepción, del Algodón y la Naranja de San Pedro, de la Naranja de Cedrales, del Takuare’ë poty de Iturbe, Ykua Bolaños de Caazapá, Ita karu de Yuty, San Solano de San Pedro del Paraná, de la Yerba Mate de Pedro Juan Caballero, del Río Apa de Vallemí, de Arroyos y Esteros, del Sombrero pirí de Limpio, de La Mercé de Zeballos cué, Itaipú de Ciudad del Este, del Tarefero de Juan León Mallorquín, de la Raza de Villarrica, Crisol de razas de Encarnación, del Aopo´i de Yataity, del Poncho de sesenta listas de Piribebuy y numerosos más que sobrepasan los 90 festivales.
Debido al auge de estos festivales, en número creciente y variedad de propuestas, en 1994 se creó la coordinadora de festivales de música del Paraguay.
A nivel internacional el mas importante festival de la canción, que entre 1978 y 1996 tuvo a compositores e interpretes paraguayos como representantes fue el Festival de la Organización de la Televisión Iberoamericana (OTI).
En la primera edicion llevada a cabo en Santiago de Chile (1978) participó Rolando Percy con la canción: Cantando de Jorge Krauch y Maneco Galeano, luego Derlis Esteche con: Tu vida en mi canción, de su autoría en Caracas, Venezuela (1979); Carlos Albospino con: La razón que nos une de Antonio Medina Bosselli en Bs. As., Argentina (1980), Alberto de Luque con: Vos y yo seremos todo de su autoría con Humberto Rubín en México (1981).
La edición de 1982 en Lima, Perú no tuvo representante de Paraguay.
Siguieron en 1983 Marcos de Brix con: Soñaremos como ayer, de Antonio Medina Boselli en Washington, Estados Unidos; en 1984, Valencia con: Una gaviota sobre el mar, de Casto Darío Martínez en México; en 1985 Lizza Bogado con: A veces quiero ser de su autoría, en Sevilla, España; en 1986 Rocío Cristal con: Papá de Casto Darío Martínez en Santiago de Chile; en 1987 Rolando Ojeda con: Procura de Pilo Lloret en Lisboa, Portugal; en 1988 Marco de Brix con: Un mundo diferente de Antonio Medina Bosselli, unica canción en la historia de las representaciones paraguayas de la OTI que se ubicó en segundo puesto en Bs. As., Argentina; en 1989 Rodolfo González Friedman con: Como aquellas nubes de Pilo Lloret en Miami, Estados Unidos; en 1990 Rolando Percy con: Hacédme soñar con la paz de su autoría en Las Vegas, Estados Unidos; en 1991 Adrián Barreto con: Hoy ha vuelto el amor de su autoría en Acapulco, México; en 1992 Oscar Benito con: Un amanecer...una canción de Antonio Medina Boselli, en Valencia, España; en 1993 Dany Durand con: Señora mía de su autoría y Rolando Percy en Valencia, España; en 1994 Cristina Vera Díaz con: Madre tierra de su autoría en Valencia, España; en 1995 Rolando Percy con: Por siempre américa de su autoría en San Bernardino, Paraguay; en 1996 los directivos de la OTI decidieron concluir con la serie de festivales. Paraguay estuvo representado por Jorge Castro.
Fuente: DICCIONARIO DE LA MÚSICA EN EL PARAGUAY por LUIS SZARAN. Edición de la Jesuitenmission Nürnberg, Alemania 2007. 507 páginas. Edición digital: www.luisszaran.org .
No hay comentarios:
Publicar un comentario